
El yogur ayuda a regenerar nuestra flora intestinal. Esta regeneración, es muy importante para un buen tránsito intestinal corrigiendo así muchos casos de estreñimiento o diarreas, y para mejorar el sistema inmunológico. Además, el yogur hace la leche mucho más digestiva, ya que tiene mucha menos lactosa que la propia leche.
Al ser yogur a partir de leche de cabra, es apto para las personas con alergia a la proteína de la leche de vaca. Tiene una textura sorprendentemente cremosa.
Al ser desnatado, es ideal para las personas que quieren una dieta baja en calorías.
Aunque el envase no te lo acabes en una comida, lo puedes volver a cerrar y consumirlo tranquilamente dentro de su fecha de consumo preferente.